domingo, setembro 04, 2005

El plan de los sociobiólogos del satan Butch. Caricaturas trágicas, terribles

"No me quiero morir así"
Coro de los refugiados sobrevivientes en Nueva Orleans

Estados Unidos tiene todo el conocimiento, la infraestructura y el recurso humano para evitar y atenuar tragedias como la del Hurakán que devastó Nueva Orleans y otras ciudades costeras.
Bastaba -por ejemplo- que la élite de su petrocracia texana ordenaran una operación de ayuda, basada en la coordinación logística de subcontratistas como la cadena Wall Mart o Federal Expres; si esto último sucediera: agua y comida caerían del cielo con calidad y eficiencia de un día para otro o hubieran evacuado la ciudad y reparado los diques en 48 horas.
Si miles de refugiados en el Centro de Convenciones y el estadio Superdome de Nuevo Orleans no han recibido ayuda es porque su exterminio forma parte de un plan. Todo es tan claro como el agua turbia del Mississipi: primero desviaron a Bagadad el presupuesto federal para la ampliación y reparación de los diques que protegían la ciudad; luego: dejan morir a los sobrevivientes. Al cabo son negros y pobres.

Ahora queremos ver a los líderes de la comunidad afroamericana que se quejaron internacionalmente por la estampilla mexicana de Memín Punguin, que critiquen la caricatura de su dirigencia y la de sus dirigentes blancos ante la tragedia en la costa del Golfo de México.

[Las fotografías del Satán Butch sonriente, en traje de bombardero, fueron facilitadas por los Grupos Anarkistas Digitales; suponemos que ellos se las piratearon de la red de redes: la más roja de las rojas]